domingo, 6 de octubre de 2013

Capitulo XVI.


Capitulo XVI.

Una tarde cualquiera, en un lugar de la ciudad.

Entramos en el ático, es enorme, el suelo es de tarima flotante oscura, los muebles son de estilo neoclásico en madera tallada, un poco más clara que la del suelo, las paredes están pintadas de un blanco impoluto aunque están decoradas por algunos cuadros abstractos, nos sentamos en el mullido sofá de cuero, Lucas y yo, uno al lado del otro y el Sñ. Gónzalez en uno de los sillones individuales.

    • Bueno... ¿Cómo os conocisteis?

    • Me estaba atracando en un callejón cuando salía del instituto, me llamó Hugo, Lucas escuchó su voz y me dijo que es su hermano.

    •  ¡¿La estabas atracando?!

    • Si pero está bien, le devolví sus cosas.- El Sñ. Gónzalez mira a Lucas queriendo decirle que no opina lo mismo.

    • Y vosotros, ¿Cómo os conocisteis?

    • Iba caminando por la calle y un conductor borracho iba a atropellarme pero afortunadamente, Lucas estaba allí para empujarme fuera de la carretera, me salvó la vida, cuando e contó su historia, le dije que podía quedarse el tiempo que quisiese.

    • Y si tenías a el Sñ. Gónzalez para ayudarme ¿Por qué eres ahora un delincuente?

    • No quería ser una molestia para Christian, le dije que viviría en una vieja nave que había rehabilitado pero, aún así tengo que ganarme la vida, tenía que elegir entre prostituirme o robar y elegí ser atracador.

    • Estás hecho un elemento, por cierto, ¿Cual es el favor que me quieres pedir?

    • Verás, Laura, quiero dejar esta vida pero para eso tengo que volver a estudiar 4 de ESO ya que no lo terminé porque me fuí de casa, necesito que hables con el director para que pueda volver.

    • A ver si lo he entendido, quieres que hable con el director de mi instituto para ver si te puede readmitir sin tener en cuenta que eres mucho mayor que nosotros y que no tendría que complicarse de esa manera la vida ¿Es eso?

    • Si, es eso.

    • Lo intentaré, además soy la única que sabe que está liado con la de naturales a espaldas de su mujer, aunque me será más fácil si estas dispuesto a participar en una pequeña actividad extraescolar.

    • ¿Qué actividad extraescolar?

    • Un musical.

    • No, ni borracho.

    • Lucas, tienes una voz preciosa, seguro que cantas genial- ¨¿He dicho eso?¨ Me quedo perpleja después de soltar aquello.

    • Gracias pero no sé cantar y además, me da vergüenza pero si tú te apuntarás conmigo...

    • Lucas, yo si que no sé cantar.

    • Laura, tu voz es inspiradora, dulce, angélical.- Me ruborizo.

    • No es negociable, si quieres que te ayude participarás en el musical.

    • Si quieres saber más sobre tu misterioso novio y su hermano perdido, participarás conmigo.- No dará su brazo a torcer, no tengo más remedio que aceptar.

    • Está bien, participaremos juntos.

    • ¿Cuándo hablarás con el director?

    • Mañana, las pruebas del musical son pasado mañana así que preparate una canción.

    • Está bien.- Hace una mueca de desagrado.
Seguimos hablando durante el resto de la tarde de el pasado de Lucas, no lo ha tenido nada fácil, sin estudios secundarios ni módulos no lo cogen en ningún sitio y para colmo está solo en el mundo, decidió dejar a su familia y le trajo consecuencias como haber pasado por todo solo, entiendo sus razones para irse, no quiere estar con su tío porque le recuerda a sus padres pero no me gusta que haya abandonado a Hugo así como así. El reloj marca las 23:57.

    • Los cuadros abstractos que tienes en las paredes me hacen recordar el tiempo que pasé aquí. 

    • Lucas, hay que irse quedan 3 minutos para llegar al pub dónde he quedado, no puedo llegar tarde.

    • ¿Por qué no lo has dicho antes?

    • Porque me acabo de dar cuenta, Sñ. Gónzalez, ha sido un placer conocerle, espero volver a verle.

    • Igualmente, Laura.- Me da dos besos y un gran abrazo a Lucas.- Cuida de esta chica.

    • Descuide, mi hermano la tiene bien protegida.

Salimos corriendo por la puerta y subimos al ascensor, de nuevo las miradas incómodas y otra de mis batallas por hacer lo correcto, suena Speak Now de Taylor Swift en el ascensor, es una de mis canciones favoritas ¨Ojalá Lucas me cantara esa canción¨ aparto esos pensamientos nocivos de mi mente, las puertas se abren y corremos por el vestíbulo y la calle hasta la moto. Subimos en ella, Lucas levanta los brazos para que pueda sujetarme mejor a su cintura.

    • Sujetate fuerte, vamos a acelerar.

    • Vale.

Me agarro a él con fuerza, arranca la moto y aprieta el acelerador, salimos despedidos a una velocidad increíble, doy un bote cuando pasamos por un badén, vamos tan rápido que me da la sensación de que las ruedas ni siquiera tocan el suelo, incluso en estos momentos cargados de adrenalina, los tranquilizadores latidos de su corazón me calman, reducimos la marcha y finalmente, nos detenemos en frente del pub, mis amigas nos miran curiosas desde la puerta mientras Lucas y yo nos bajamos.

    • ¿Con quién has quedado que no puedes llegar tarde?

    • ¿Ves a esas chicas de allí?- Asiente- Son mis amigas, ellas no saben que estoy con tu hermano y antes de que esto pasara yo nunca llegaba tarde, si empiezo ahora van a sospechar.
    • Y ¿Por qué nos miran así?

    • ¿Así, cómo?

    • Expectantes.

    • Esperan un beso.

    • Lo llevan claro...

    • Hablaré mañana con el director, no te preocupes y preparate la canción, adiós, Lucas- Le digo alejandome y agitando mi mano.

    • Hasta luego.

Corro hasta mis amigas, me miran con miradas acusatorias.

    • ¡Hola!

    • ¿Quién era ese?

    • Que directa, estaba comprando en el centro comercial y cuando estaba en el taxi para volver, ha habido un accidente y se ha colapsado todo, salí del taxi y empecé a andar, me encontré a este chico en la calle y al ver lo que me pasaba, se ofreció a ayudarme, ni siquiera sé su nombre.

    • Ams , pues estaba muy bueno.

    • Que me vais a contar... ¿Vamos dentro?

    • Si- Dicen las 3 al unísono.

Entramos en Cocktails & Dreams (el nombre de el pub), me alegra ver que algo en mi vida no ha cambiado, todo sigue como antes de que conociera a Hugo, miro a Mario y este me sonríe, las Crazy se van a nuestra mesa habitual, mientras yo me dirijo a pedir las bebidas.

    • Aquí está mi clienta favorita ¿Dónde has estado todo este tiempo?

    • Ocupándome de algunos asuntos, el instituto, además mi madre me a dejado sola y tengo que hacer tareas, yo, tareas, es muy frustrante- Se ríe a carcajadas.

    • Bueno, me alegra saber que estás viva ¿Qué vais a tomar?

    • 3 Fantas, 1 Coca- Cola y un vaso de Ron Miel.

    • ¿Unos días díficiles?- ¨No le puedo contar lo de Lucas...¨

    • El otro día pille a mi novio tirándose a otra en mi mesa del instituto.

    • ¡Uuhh!

    • Si...

    • Entonces, un Ron Miel para la adolescente con ganas de fiesta pero es la última vez que como se entere el jefe se me cae el pelo.

    • Gracias, Mario.

Pasamos la noche juntas, como en los viejos tiempos, estoy volviendo a casa y noto la mirada de dos figuras extrañas tras de mí.

      • Eii, guapa ¿Dónde vas tu sola?

      • Eso ¿Y tu novio?

Sigo andando, no quiero darme la vuelta y ver a esos dos tipos. Atravieso la calle y giro en un cruce, algo me sujeta la muñeca, me giro y los veo, dos chicos, uno moreno, con ojos marrones, corpulento y alto y el otro, pelirrojo, lleva gafas y tiene los ojos azules.

    • Sueltame, capullo.

    • Hui, mira, si puede sacar las uñas ¿No nos oías, bombón?

    • Se llama ignorar.
    • Eso a dolido.- Se ríen.
    • Sueltame, joder.

    • Dejame que piense, ummm, no.
Me sujeta del antebrazo y me empuja contra la pared, el pelirrojo se pone contra mí, aprisionándome, intento gritar pero el chico alto me tapa la boca mientras el otro me rompe la camiseta, logro morder la mano de el alto y grito lo más alto que puedo pero es un grito breve ya que me da un puñetazo y caigo al suelo, mi cuerpo deja de responderme, los ojos se me van cerrando poco a poco, veo a el pelirrojo bajarse la bragueta y se lo que van a hacer, me van a violar, no puedo seguir manteniendo los ojos abiertos y los cierro notando que me voy, en ese estado vegetativo logro escuchar algunas cosas como: Dejadla en paz, hijos de puta, golpes, gritos, insultos y un ¿Estás bien? Noto como si me subieran en brazos y hago un esfuerzo sobrehumano para abrir los ojos e intentar ver a mi héroe pero lo único que veo es una sombra, entonces, pierdo totalmente el conocimiento.

           Fin. Próximamente: ¡Deja de colarte en mis sueños! 
          La segunda parte de Que Duro Es Ser Adolescente.

viernes, 27 de septiembre de 2013

Capitulo XV.

Capitulo XV.

Una mañana cualquiera, en un lugar de la ciudad.

      • ¿Cómo que tu hermano?
      • Ya ves.
      • Hugo sólo tiene a su tío.
      • Si es así, ¿Cómo sé que tiene una marca de nacimiento en el hombro derecho?- Me quedo alucinada, es cierto.
      • ¿Por qué nunca me ha hablado de ti?
      • Cuando me marché, Hugo sólo tenía 9 años, no creo que le guste hablar de su hermano mayor descarriado.
      • ¿Te importaría guardar la navaja y devolverme mis cosas? Impresionas un poco.
      • Con una condición, quiero volver a verte.
      • ¡¿Qué?! No.
      • Por favor, sólo quiero saber de mi hermano pequeño- Su mirada es la de una persona triste y solitaria ¨Pobrecillo¨
      • Esta bien, toma mi número, llámame cuando quieras hablar.- Le entrego un papelito con mi móvil y él me devuelve mis cosas.
      • Por cierto ¿Cómo te llamas?
      • Laura y ¿Tú?
      • Lucas.- Sonríe y se va por el callejón.
¨Dios, ¡Qué sonrisa!¨ Casi me da un patatus, Lucas es un poco diferente a su hermano, tiene el pelo cobrizo en lugar de rubio y un poco largo peor no llega a media melena, de cuerpo es casi igual a Hugo, quizá Lucas sea un poco más alto, tiene una espalda ancha, es evidente que hace ejercicio, está en buena forma y tiene unos preciosos ojos azules, deben ser un rasgo de la familia, no transmiten los mismos que los Hugo, estos son diferentes, rebeldes, peligrosos, lo contrario a los de mi novio. Salgo de el callejón, entro en mi bloque y me monto en el ascensor, el viaje hacia el vestíbulo de mi piso se hace eterno, no dejo de pensar en Lucas, a sido toda una revelación pero ¿Qué quiere de mi? ¿Qué puedo hacer yo por él? ¿Cuándo me llamará? Y sobre todo ¿Por qué Hugo no me informó sobre su existencia? No me da tiempo a seguir pensando, he llegado a mi destino, el ascensor se para y la puerta metálica se abre, Hugo se encuentra de espaldas a mi, sentado en las escaleras con la mirada perdida, me acerco a él por detrás.

    • ¿Sufres por amor?- Se gira y me mira sorprendido.
    • ¡Laura!- Se pone en pie, me besa y me levanta en volandas, me río en el aire mientras damos vueltas.- Pensé que no volvería a besarte, te quiero.
    • Estoy aquí, tranquilo.
    • ¿Te encuentras bien? ¿Te ha echo daño?
    • Estoy bien, estoy bien.
    • Estaba tan preocupado.
Me abraza, me estrecha fuerte contra él y en sus brazos se que de verdad me quiere y no hay nada que pueda cambiarlo. Su proximidad quema en mi venas como el fuego, le deseo desde hace demasiado, le necesito, ya. Le beso por sorpresa, reacciona rápidamente, me besa con tranquilidad, ya estoy harta del control y de la tranquilidad, quiero pasión, arder junto a él, se lo dejo claro desde ahora, le empujo contra la pared, Hugo abre la boca para ahogar un grito y yo aprovecho para meter mi lengua y fundirla con la suya, él abre los ojos sorprendido, me levanta para que pueda enroscar las piernas en su cintura, quedo suspendida en el aire, sujeta por Hugo, siento su erección presionando en mi vientre, nos acerca a la puerta de su piso con dificultad y la abre, separa su boca de la mía, mientras me transporta a su habitación, le recorro el cuello a besos, caemos en su cama, yo encima de él, sigo besándole el cuello, escucho un gemido y le muerdo el cuello, Hugo ahoga un grito, me levanta la cara y me besa sin despegar un centímetro de su cuerpo de mí, nuestra ropa va desapareciendo a medida que nuestra calor va aumentando y finalmente, me encuentro en el paraíso, soy suya y él mío, unidos para siempre en una danza reservada solo para amantes.

* * * * *

Estoy en los brazos de Hugo después de haber hecho el amor, él sigue dormido, es como un ángel caído del cielo y es todo mío, su pelo rubio alborotado brilla con la luz del Sol que entra por la ventana, podría contemplarlo dormir toda la vida pero todo se acaba, Hugo empieza a abrir los ojos lentamente.

    • Hola, nena.
    • Hola.
    • ¿Qué tal estas?

    • Bien, contenta.
    • Me alegro por eso- Se alza y me da un dulce beso en los labios.
Nos quedamos mirándonos en silencio, mi teléfono suena rompiendo el contacto visual, veo que es un múmero desconocido e intuyo quién será.

    • Espera un momento aquí- Asiente y me voy al baño.
Cojo el teléfono y, al instante, sé que es él, esa dulce melodía que es su voz no puede ser de otra persona.

    • Hola.
    • Hola, Lucas. Dime, que ocurre.
    • ¿Estas libre esta tarde?
    • No, lo siento.
    • Por favor, Laura es importante, tego algo que pedirte y necesito hablar contigo.
    • Tengo un compromiso a las 12 ¿Llegaré?
    • Si, gracias ¿En el callejón a las 7?
    • Allí estaré, hasta luego.
    • Adiós.
Vuelvo a la habitación de Hugo, sigue en la cama, me mira con curiosidad, entonces, me doy cuenta de que llevo encima solo su camiseta, sus ojos me miran con vehemencia y algo oscuro. Me tumbo a su lado y me besa, su ávida lengua se enrosca en la mía, se tumba encima mía con su peso sobre sus codos, estamos jadeando y sin aliento.

    • ¿Otra vez?- Asiente.- Eres insaciable, nene.
Me sonríe de medio lado, como un depredador y volvemos a arder juntos.

* * * * *

Entro en el callejón y veo a Lucas, va vestido con una camiseta blanca, ajustada que le marca su cuerpo, unos jeans vaqueros y unas convers blancas. ¨¡Qué bueno está!

    • Hola- Se lo digo con tranquilidad.
    • Ei, vamos a algún sitio más agradable para hablar.
    • Como quieras.
Salimos del callejón con cautela, veo una moto blanca, creo que es una Kawasaki, Lucas se acerca a ella.

    • ¡¿La vas a robar?!
    • No, tengo las llaves.
    • ¿Es tuya?- Asiente.
Sub a la moto, desde aquí la ciudad se ve diferente, Lucas arranca y la moto comienza a circular, vamos sin casco aunque no me preocupa, sabe manejar bastante bien esta moto, el viento acaricia mi cara, me sujeto a la cintura de Lucas y apoyo el lado derecho de mi rostro en su ancha espalda, podría acostumbrarme a esta sensación de libertad, el viaje se me hace demasiado corto, Lucas aparca la moto frente a un edificio de lujo, diría que tiene unas 55 plantas.

    • ¿Qué hacemos aquí?
    • Es un buen lugar para hablar ¿No te parece?
    • ¡¿Tienes un piso aquí?!
    • No, pero un amigo si.
    • Ah...
Entramos en el edificio, el vestíbulo es inmenso, entero pintado de blanco, los muebles son de madera oscura y el suelo está hecho de mármol, Lucas y yo entramos en el ascensor cubierto de espejos, nos miramos incómodos, mi parte A (Ardiente) me pide a gritos que le arranque la rpa y se lo haga en el suelo, afortunadamente mi parte S (Sensata) es la que gana recordándome la sonrisa de Hugo, sus besos, sus caricias, nuestros momentos y cuánto le quiero, por lo que me contengo, miro otra vez de reojo a Lucas, es igual de guapo que Hugo ¨Qué viaje más largo¨ En el ascensor comienza a sonar Toxic de Britney Spears, una canción muy apropiada, por fin las puertas metálicas se abren. Salimos, estamos en la última planta, caminamos por el pasillo hasta la última puerta y llamamos al timbre, sale un hombre mayor, mide más o menos 1, 30, su pelo y su barba son canosos por su edad, va vestido elegantemente y parece feliz de ver a Lucas.

    • Lucas ¡Cuánto tiempo!- Se abrazan.
    • Hola, Sñ. Gónzalez.
    • Llamáme Christian, desde que nos conocemos te lo habré dicho unas 50 veces.- Se ríe.
    • Le presento a Laura, es la novia de Hugo.
    • ¿Tu hermano Hugo?
    • Si.
    • Es un inmenso placer conocerla, señorita, pasad por favor.
    • Gracias.

viernes, 6 de septiembre de 2013

Nota informativa :)

No voy a poder subir el capítulo siguiente este lunes, lo siento :( Y es que me voy de viaje con mi familia a Italia y Francia en un crucero pero el Lunes 23 subiré dos capítulos. Adiós y disfrutad de la lectura ^^

lunes, 2 de septiembre de 2013

Capitulo XIV.

Capitulo XIV.

Una mañana cualquiera, en un lugar de la ciudad.

Entramos por la puerta del instituto cuando ya estaban cerrando, corremos por el pasillo y entramos en clase antes de que llegue el profesor. Todos se nos quedan mirando, supongo que es por la huida de ayer y la amenaza de Hugo a Ángel.

              - Me siento observada.

              - Lógico, nos está mirando todo el mundo.

              - Creo que sospechan de nosotros. Peleate conmigo.

              - ¿Cómo?

              - Que nos vean discutir por lo que le hiciste ayer a Ángel, que piensen que estoy de parte suya.

              - Como quieras...

Agacho la cabeza y doy un spring hasta que llego a mi sitio y me siento en la silla, Hugo se acerca a mi sitio cumpliendo con el plan.

             - Laura, esta conversación no a acabado- Me grita.

             - Si que a acabado ¿Tú cuántos añitos tienes, bonito? Que no puedes ir por hay proteguiéndome, joder, no te necesito.

             - Eres la tía más insufrible que he conocido, pues nada sigue defendiendo a el capullo de Ángel.

             - No te aguanto.



Se sienta a mi lado y me da la espalda, noto como la gente cuchichea sobre nosotros, mi plan a dado resultado. La profesora entra en clase y se queda mirando fijamente a Hugo.



             - Hugo ¿Por qué no llevas el uniforme?



"Mierda, ¿Cómo responde a eso?"



             - Anoche de camino a casa, me atracaron y me rompieron el uniforme con una navaja.



            - ¡Oh! Te encuentras bien ¿no?

            - Si, no me hizo daño.

"Si ella supiera" mi pensamiento me hace sonreir, la profesora empieza con la clase, durante la lección rememoro los momentos que he pasado con Hugo, nuestro primer beso furtivo en la escalera, su protección contra Ángel, la escapada a aquel prado, el juego del StrepNata, la pasión cuando salimos de la ducha y la posterior interrupción. Antes de que me de cuenta el tiembre del fin de la clase suena, toca ese pequeño rato libre en el que se va un profesor y llega el otro, me acerco a mis amigas.

           - ¡Hola!

          - Hombre, mira la fujitiva...

          - Siento haber estado tan perdida, lo de Ángel fue un golpe duro.

          - Sabemos que le querias mucho ¿Por qué no te vienes hoy a el pub con nosotras?

          - Claro, no tengo nada mejor que hacer- Miento, he quedado con Hugo, tendré que hablar luego con él.

El profesor de música entra por la puerta y cada alumno va a su asiento. Cuando llego al mío, Ángel me mira fijamente desde el sitio de al lado.

         - Chicos, el instituto va a organizar un musical para recaudar fondos para una ONG, las pruebas serán dentro de tres días en el gimnasio, a las cinco en punto.

Tras este anuncio comienza con la lección de historia de la música, cuando el profesor se va aparece la de matématicas, después la de física, luego el de naturales y por último el de inglés. No me extraña que cuando salgamos por la puerta lo hagamos a esa velocidad. Fuera del instituto camino sola por la calle, ya he dejado a mis amigas en sus casas y voy por la plaza que hay justo antes de llegar a mi bloque, un hombre sale de entre las sombras y me apunta con una navaja.

         - Entra en el callejón.

Obedezco y entro. Es frío y oscuro parece otro mundo distinto a el de la plaza llena de flores dónde antes me encontraba. Se pone frente a mí y me mira a los ojos. Es extraño, sus ojos me suenan vagamente de algo.

        - Dame todo lo que lleves.

       - Vale pero, no me hagas daño por favor- Estoy al borde de las lágrimas, le doy mi dinero y mi móvil, el cúal en sus manos empieza a sonar 'Ni la mitad de nada' el tono que le he puesto a Hugo.

       - ¿Quién es Hugo?

       - Mi novio.



       - Cógelo, dile que te están atracando y ponlo en altavoz, me encantará escuchar su miedo.



Hago lo que me dice y cojo la llamada.



       - Laura ¿Estás bien?



       - No mucho, me están atracando en un callejón.



       - ¡¿Qué?! ¿Con navaja y todo?



       - No, me están amenazando con una flor no te jode...- El atracador coje mi móvil y cuelga.



       - ¿Cúal es el nombre completo de tu novio?



      - Hugo Hernández Sánchez- Al escuchar el nombre su rostro se vuelve pálido- ¿Os conoceis?



      - Es mi hermano.

viernes, 30 de agosto de 2013

Capitulo XIII.

Capitulo XIII.

¨No quieres parar¨ me dice mi parte juguetona. ¨Debes parar o cambiara¨ me dice mi parte sensata. Hugo está sobre mí, besándome, siento su ereccion sobre mi vientre, lo que provoca que este más encendida que nunca, solo él despierta esta pasión latente en mí, Hugo comienza a besarme el cuello, me dejo hacer girando la cabeza para hacerselo más fácil, giro y me situo sobre él, empiezo a besarle, mi boca se mueve sola bajando por su cuello, entonces mi mente me proporciona una excusa perfecta para parar, hay que ir al instituto. Me acerco a su oído y le susurro:

            - No vamos a llegar al instituto.- Se acerca a un oído y murmura en el-.

            - Si no quieres hacerlo solo dímelo, no hace falta que pongas como excusa el instituto.

Me ha pillado, me levanto y voy al baño. Vuelvo a salir en poco tiempo, veo a Hugo ya vestido recogiendo la mesa, tiene todo el cuerpo lleno de nata dado a que cuando se tumbo encima mía se nos cayeron los pasteles encima, se ven las manchas en su camiseta y ahora que me detengo a pensar yo tambien estoy pringosa, me acerco a Hugo por detrás y le abrazo.

            - ¿Quieres ducharte?- Hugo me mira sorprendido.

            - ¿Contigo?

            - ¡No!  Estamos pegajosos, no podemos aparecer así en clase.

            - Tienes razón pero, mejor voy a ducharme a mi casa- Busca las llaves en sus bolsillos y pone                    cara de preocupación- Me e dejado llaves en el piso ¿Qué hago?

           - Tranquilo, duchate aquí, tu tío se dejo ropa cuando vino a pasar un fin de semana.

          - Gracias- Sonríe.

Voy a la habitación de mi madre, abro el armario "¿Dónde está? ¡Ah! Aquí" cojo la ropa y vuelvo al salón. Estoy sola.

         - Hugooo- Le llamo.

         - Estoy en el baño.

Voy hacia allí y Hugo ya está sin camiseta.

         - ¿Traes la ropa?

         - Sí, toma.

        - Gracias- Me mira impaciente- ¿Te vas o te duchas conmigo?

        - Me voy, me voy.

"¿Qué acaba de pasar ahí dentro?" A través de la puerta suena el agua cayendo de la alcachofa de la ducha, me acerco a mi habitación, abro el armario, saco el uniforme, lo pongo sobre la cama y voy a el otro aseo. Una vez allí, me desnudo, me meto en la ducha y pongo el agua ardiendo. El agua cae sobre mi piel relajándome, cojo el champú y me enjabono el pelo, luego lo enjuago y me lavo el cuerpo, salgo de la ducha y me pongo una toalla en el pelo y otra a mi alrededor. "¿Dónde está mi uniforme?" Mierda, me lo e dejado en la cama, salgo del baño, cruzo el pasillo y corro hasta mi habitación, misión cumplida. Deslizo la toalla por mi cuerpo, me hago una coleta alta, me pongo la ropa interior de encaje rosa pálido y sin que lo espere la puerta se abre dejándome semidesnuda delante de un Hugo cubierto solo por una toalla alrededor de su cintura que le cae de esa forma tan sexy, su torso musculoso y bien definido me deja sin aliento, sus ojos ardientes me atraviesan haciendo que mi sangre hierva. Se acerca a mi, parece confiado, sexy, rebelde, con su pelo rubio alborotado, llega hasta mi y me besa fuerte, duro, apretándose contra mí, su lengua entra en mi boca y se funde con la mía, enreda su mano en mi coleta y tira hacia atrás de ella para dejarle acceso libre a mi cuello, se abre paso por mi piel, besándola, acariciándola, mordisqueándola, su piel quema contra la mía, mis manos se clavan en su espalda y... suena mi móvil. Hugo se separa de mi y me mira impaciente, mientras yo hablo por teléfono.

        - ¿Si?- Respondo entrecortadamente.

        - Laura ¿Dónde estás?

        - En mi casa ¿Por?

       - Porque quedan 7 minutos para que cierren las puertas del instituto ¡Corre!- Cuelga.

       - ¡Mierda! Quedan 7 minutos para que cierren las puertas vistete rápido.

Hugo sale de la habitación mientras, yo me visto y me peino. Salgo por la puerta junto a él, subimos a su coche y vamos a clase, no puedo evitar pensar en lo que hubiera pasado si no llega a sonar mi móvil.

sábado, 20 de julio de 2013

Capitulo XII.


Capitulo XII.

Una mañana cualquiera, en un lugar de la ciudad.

¨Por fin es viernes¨ pienso nada más levantarme. Me visto medio dormida y voy a la cocina a prepararme el desayuno, cuando suena el timbre. Abro la puerta y veo a Hugo con unos pasteles de chocolate que parecen deliciosos.

    • Hola, guapo
    • Hola, te traigo el desayuno- Sonríe-.
    • Pasa- Entra en el piso y se sienta en el sofá- ¿Has desayunado ya?
    • No, vengo a desayunar contigo.
    • ¿Has madrugado mucho?
    • Si pero, a merecido la pena por estar un rato contigo antes del instituto.
    • ¿Quieres algo de beber?
    • Leche con cacao.- Traigo dos vasos con la bebida y me siento a su lado-.
    • ¿Jugamos a un juego?- Le digo a Hugo-.
    • ¿Qué juego?
    • Cada uno coge un pastel de nata y con los ojos cerrados tiene que meter el pastel en la boca del otro pero...
    • Pero...
    • Cada vez que alguno falle se tiene que quitar la prenda que le diga el otro.
    • ¿Quieres jugar conmigo al Stripnata?- Suelto una carcajada por la ocurrencia-.
    • Si te atreves, si.
    • Entonces, juguemos.
La parte responsable de mi mente me dice que es peligroso, que si este juego comienza quizá no pueda parar pero, por primera vez no quiero ser sensata, ni responsable quiero escuchar esa parte juguetona y divertida que me dice que será divertido y que tengo control. Empezamos a jugar, Hugo encesta el primer pastel en mi boca fácilmente y yo encesto el mío en la suya, luego pienso ¨Si sigo así corro el riesgo de tener que desnudarme¨, una idea acude a mi mente. Me quito la venda y veo a Hugo con el pastel en la mano y los ojos tapados, va hacia mi boca, giro la cabeza y me mancha de nata, corro a ponerme la venda de nuevo. Me la quito a la misma vez que Hugo.

    • Fallaste- Sonrío-.
    • Dime la prenda.
    • Camiseta.
Hugo me sonríe pícaro y yo le devuelvo la sonrisa del mismo modo mientras se desnuda y deja al descubierto su cuerpo musculoso. No sé si seré capaz de soportar verlo sin ropa, así que decido no seguir haciendo trampas para que así tengamos las mismas posibilidades. Seguimos jugando, los dos con ojos tapados, mientras me como un pastel de chocolate, noto que e fallado el tiro y eso significa, tener que desnudarme delante de Hugo, el pastel de chocolate ya no me parece tal dulce.

    • ¿Qué prenda?
    • Camiseta- Mientras me la quito, noto la mirada de Hugo en mi espalda, cuando me giro, él me mira como un lobo a punto de abalanzarse sobre su presa-.
    • ¿Seguimos?- Asiente-.
Volvemos a retomar el juego, seguimos fallando a Hugo solo le quedan sus boxer y a mí mi ropa interior. Después de quitarse los pantalones se sienta en el sofá y no puedo dejar su mirar su notable erección, al igual, que él no puede dejar de mirarme. Mi corazón está a punto de explotar, quiero saltar sobre él pero, no puedo. Cojo un pastel y para intentar calmarme empiezo a comer, la nata me mancha los dedos y los chupo, Hugo me mira con atención como si lo estuviera haciendo queriendo, un sudor frío me recorre la frente cuando Hugo, me sujeta la mano y la limpia con su boca, intenta provocarme, lo sé. Se inclina sobre mí y me besa sumiéndonos en una pasión sin freno, lo atraigo hacia mí provocando que se tumbe encima, en ese momento sólo una pregunta acude a mi mente: ¿Quiero parar?

domingo, 14 de julio de 2013

Capitulo XI.


Capitulo XI.

Una mañana cualquiera, en un lugar de la ciudad.

El beso continua y yo sigo en una nube, los besos de Ángel no me llenan ni la mitad de los que me llenan los de Hugo.

    • ¿Se lo vamos a decir a nuestros amigos?
    • No creo que sea buena idea creo que si lo hacemos pensaran que has dejado a Ángel porque le estabas poniendo los cuernos conmigo y por lo tanto, que eres una golfa.
    • Entiendo, tienes razón esperaremos un poco para hacerlo público.
Vuelve a besarme, cada vez que lo hace el corazón me da un vuelco, sé que él es mi árbol del bosque, sé que no estoy equivocada. Volvemos al patio, junto a mis amigas.

    • ¿Qué tal?¿Has encontrado a Ángel?
    • Sí y mejor que no lo hubiera echo- Miro a Hugo cómplice para que sea consciente de mi actuación-.
    • Pensé que deberías saberlo, no era justo...- Dice Inés cohibida-.
    • No, no lo era, gracias- Hugo me abraza y me da un beso en el pelo-.
    • ¿Alguien me puede decir que está pasando?- Les cuento toda la historia, incluido mi rodillazo-.
    • Te abras quedado a gusto, ¿no?- Me río y asiento-.
    • Pareces muy animada a pesar de todo.
    • Antes de enterarme de esto, la cosa entre Ángel y yo no iba muy bien... me lo veía venir.
Suena la campana y subimos a clase dónde sabía ya a lo que me iba a enfrentar. Estamos todos hablando, hasta que Ángel entra en clase con un ojo morado, el labio abierto que ya está curado y además anda de forma rara entonces, se hace el silencio.

    • Ángel, ¿Qué te a pasado? Te han puesto la cara como un pan- Le dice un amigo suyo-.
    • Vete a la mierda.
El Lapos entra para dar la clase, cada unos va a su sitio, el mío como no, al lado de Ángel. En la mitad de la clase él me pasa una nota.

Sé que me equivoque, no tengo perdón, te e echo daño, no tenía que haberte engañado pero, te quiero y tu también, me lo dijiste en múltiples ocasiones. Perdoname.

Ángel.

Leo la nota y le escribo yo una en el reverso de la suya.

Dudo si algún día me quisiste, es evidente que no porque no tienes corazón, ni alma. Si lo hubieras confesado por lo menos sé que algún día podría perdonarte pero, no así. No cuando te conviertes en un monstruo obsesionado, cambiaste y lo perdiste todo.

Laura.

Lee atentamente mi carta, aprieta los puños, sus ojos muestran enfado, se levanta y empieza a gritarme delante de todos.

    • ¿Cómo tienes coño de decirme que nunca te quise?
    • Teniéndolo, tú nunca me quisiste sólo me utilizaste.
    • ¿Encima? Si todo el mundo sabe que me los ponías con Hugo.
    • ¿Qué dices? Hugo es sólo un amigo, el infiel eres tú que encima te pille tirándote a Patricia.
    • Eres una puta y una zorra, todo el tiempo que estuve contigo fue una farsa- Hugo se levanta y lo empuja contra la pared-.
    • Como vuelvas a decirle algo a Laura te reviento- Le dice Hugo-.
    • Vamos Hugo, no merece la pena.
Cojo a Hugo del brazo y nos vamos fuera de clase sin rumbo fijo. Salimos a la calle, él se acerca a un flamante deportivo descapotable rojo con la tapicería en cuero blanco, por un momento pienso que va a robarlo pero, cuando saca las llaves, vuelvo a respirar tranquila, montamos en el coche y mientras Hugo conduce, vamos hablando.

    • ¿De donde has sacado este coche?- Digo alucinada, sus ojos azules se tornan tristes-.
    • Me lo dejaron mis padres en herencia cuando murieron.
    • ¿Quieres contarme que les pasó?
    • ¿De verdad quieres saberlo?- Asiento- Yo era muy pequeño cuando esto pasó pero, lo recuerdo como si fuera ayer, hubo un incendio en la cocina todo ardió pronto, gracias a las alarmas nos despertamos y los bomberos fueron avisados, instalaron una colchoneta bajo la única ventana que quedaba libre para poder saltar desde la casa, tenía miedo a saltar y el fuego estaba próximo, mis padres me empujaron y caí a salvo pero, un viga cayó antes de que saltaran dejándolos encerrados en aquella prisión- Una lágrima furtiva se derrama por su mejilla, se la retiro con una caricia-.
    • ¿Estás bien?
    • Si.
    • Espera un momento, ¿No hay que tener dieciocho años para sacarse el carné?
    • Tengo dieciocho años , es que e repetido dos veces cuarto.
    • Uii, que malote- Hugo suelta una carcajada y aparca-.
Bajamos del coche y miro a mi alrededor, un precioso bosque y un río de aguas cristalinas se extienden ante nosotros, la luz del Sol se filtra a través de las hojas de los árboles y en el río se pueden ver los peces nadando.

    • ¿Dónde estamos?
    • Cuando mis padres murieron y mi tío se hizo cargo de mí, me trajo a este lugar y me dijo: Hugo, sé que ahora crees que todo a acabado, que estás solo en el mundo pero, te equivocas. La vida es muy corta para no ser quién eres; enamorate, canta, baila, ríe, llora, sueña y vive intensamente antes de que baje el telón y la obra de tu vida acabe sin aplausos.
    • Es muy bonito...
    • Si pero, no hablemos de cosas tristes- Me agarra por la cintura- Con todas estas confesiones se nos a olvidado que estamos solos fuera del instituto por primera vez...
    • Me e fijado.
Pasamos el resto de la mañana y de la tarde allí, hasta que cae la noche, entre caricias y besos.

    • Luego, me mude a Portugal y...
    • Hablas demasiado ¿Sabes?- Le interrumpo y junto lentamente sus labios con los míos, Hugo me acerca más a él, me besa el cuello y le paro- Vamos a casa, es tarde...
    • Claro.
Vamos andando al coche, el resto del camino no decimos nada, cada uno sumido en sus pensamientos. ¨No quiero estropearlo con Hugo, cuando me acosté con Ángel, cambió, no pienso permitir que me ocurra lo mismo con Hugo, esta vez no¨ pienso de camino casa. Llegamos pronto a rellano de nuestros pisos.

    • Hasta mañana ¿no?
    • Si.
Le beso de nuevo, me meto en el piso, cojo mi móvil y le pongo los auriculares, me tiro en la cama y me pongo a escuchar musica durante un rato mientras pienso: ¨Otra noche sola pero, lo prefiero, no quiero estropearlo con Hugo¨ y con este pensamiento caigo presa del sueño.